Casa mallorquina construida en 1960 y situada en el emblemático barrio de Santa Catalina. Esta propiedad consta de dos pisos escriturados de forma independiente en planta baja y primer piso, cada uno con tres habitaciones. La planta baja, de 109m2, cuenta con acceso independiente desde la calle y salida a un patio, mientras que el primer piso, de 101m2, dispone de un trastero independiente en el jardín. El edificio destaca por sus techos altos, carpintería de madera, vigas a la vista y suelos hidráulicos, que resaltan el encanto de las antiguas casas mallorquinas.La propiedad está rodeada de todos los servicios necesarios, como colegios, supermercados, zonas de ocio, el Mercado de Abastos, transporte público, un club de tenis y áreas deportivas. Además, se encuentra a pocos metros del paseo marítimo y del centro de la ciudad.Este edificio es ideal tanto para reformar como para construir un edificio de varias plantas. Si deseas más información o visitar esta propiedad, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.
Escribe tu dirección. Obtén al instante tu valoración GRATUITA