Esta maravillosa casa fue restaurada por la actual propietaria fusionando dos estilos; típico isleño y moderno.
Parte de la casa original conserva los muros interiores como exteriores respetando en todo momento la esencia de la vivienda de esa época.
La vivienda se encuentra en Tiscamanita, un típico pueblo del interior de Fuerteventura muy bien comunicado.
Su ubicación es ideal para explorar todas las partes de la isla. A unos 20 minutos de Gran Tarajal como a Caleta de Fuste.
La vivienda tiene un encanto especial potenciando los espacios abiertos, grandes ventanales, zonas exteriores que permiten contemplar y convivir con naturaleza de la isla y de su magia.
Ideal para destinar a la explotación turística o para vivir tranquilamente disfrutando de un entorno privilegiado típico isleño.
En su interior, encontrarás una cocina independiente con despensa, un comedor con acceso a un patio exterior y dos amplios salones con ventanas panorámicas con vistas al exterior. Además, cuenta con dos dormitorios espaciosos, uno de ellos con baño en suite, y el dormitorio principal dispone de un gran vestidor y una ducha espectacular.
La zona exterior es igualmente preciosa, con una piscina privada y una terraza cubierta donde podrás disfrutar de las vistas mientras saboreas una deliciosa comida con familiares y amigos, cocinada en el tradicional horno de piedra y barbacoa.
Esta propiedad es perfecta para quienes buscan una experiencia auténtica en Fuerteventura.
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